LECTURA.- El corazón, un músculo del tamaño de un puño, bombea incansablemente sangre a todo el cuerpo. Su trabajo es vital: transportar oxígeno y nutrientes, eliminar desechos y mantenernos con vida. Pero, ¿cómo funciona esta máquina tan precisa?
Un circuito vital: La sangre desoxigenada llega al corazón por las aurículas, pasa a los ventrículos y, con un impulso, es bombeada a los pulmones a través de la arteria pulmonar. Allí, se oxigena y regresa al corazón por las venas pulmonares. Finalmente, el corazón la envía a todo el cuerpo por la aorta.
Señales de alerta: Si el corazón no funciona correctamente, podemos notar algunos síntomas:
- Dolor en el pecho: Sensación de opresión, presión o ardor, que puede irradiarse al brazo izquierdo, cuello o mandíbula.
- Falta de aire: Dificultad para respirar, especialmente al hacer esfuerzo o al acostarse.
- Fatiga: Cansancio excesivo sin causa aparente.
- Palpitaciones: Latidos cardíacos rápidos, irregulares o saltones.
- Hinchazón: Acumulación de líquido en los pies, tobillos o abdomen.
Consejos para un corazón sano:
- Dieta saludable: Consumir frutas, verduras, cereales integrales y proteínas magras. Limitar las grasas saturadas y el azúcar.
- Ejercicio regular: Al menos 30 minutos de actividad física moderada la mayoría de los días de la semana.
- Peso saludable: Mantener un índice de masa corporal (IMC) adecuado.
- No fumar: El tabaco es un enemigo del corazón.
- Controlar la presión arterial y el colesterol: Medirse regularmente y seguir las recomendaciones médicas.
El corazón es un órgano vital que debemos cuidar. Si experimentamos alguna señal de alerta, es fundamental consultar a un médico para obtener un diagnóstico y tratamiento oportuno. Con un estilo de vida saludable, podemos mantener nuestro corazón fuerte y activo por muchos años.
Nota: Esta información no sustituye la consulta médica.
---
0 Comentarios:
Publicar un comentario