LECTURA.- Conocemos como ‘alarma’ a la señal o aviso que se da para advertir de cualquier peligro.
La gran mayoría de palabras en español tienen su origen en el griego, el latín o el árabe. Además de ser un idioma muy influenciado por la lengua anglosajona. Sin embargo, hay múltiples palabras cuyo origen es muy curioso. Y una de ellas es la palabra “alarma”.
Esta palabra surge durante los combates que los españoles y los italianos realizan de manera conjunta en el país trasalpino durante el siglo XVI.
Este era el grito que se hacía ante la presencia del enemigo, advirtiendo que los soldados debían tomar su arma para defender aquel lugar.
No se sabe exactamente cómo entró la palabra en el vocabulario español, aunque se cree que se originó durante una guerra conjunta entre las fuerzas españolas e italianas. Los españoles escucharon estas palabras repetidamente de los soldados italianos y tuvieron que responder. Como muchas otras palabras, fue adoptada en el vocabulario español.
Cuando eran atacados, los italianos gritaban “all’arme”, que no es otra cosa que “a las armas”. Posteriormente se “adoptó” por los hablantes del castellano como “al arma” para los casos en los que se avistaba algún peligro, derivando finalmente en la actual “alarma”.
Actualmente, la palabra alarma no ha perdido el significado de su origen. Pues, si lo analizamos detenidamente, significado estar prevenido y en guardia, ante una situación, algo o alguien, para que no nos tome desprevenidos.
Hasta día de hoy, la palabra alarma se sigue utilizando, aunque actualmente con distintos conceptos. Ya que, podemos referirnos a cosas muy distintas. Por ejemplo, como situación de riesgo por alerta meteorológica, alarma para el celular, que nos avise de un evento o como mero despertador. Pero hay un concepto concreto del que hablamos habitualmente, alarma de seguridad.
Hoy podemos decir que estamos hablando de una situación peligrosa, una prohibición o simplemente una prohibición de llegar tarde.
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